Tétanos.
El tétanos es, afortunadamente, una infección infrecuente en nuestro entorno debido a que la gran mayoría de la población está correctamente vacunada; sin embargo cuando uno realiza un viaje tiene más probabilidades de sufrir cortes o heridas que estando en casa.
Clostidrium tetani está ampliamente distribuido en la naturaleza vegetal (suelo, plantas, hierros, etcétera) por lo que cualquier herida puede ser la puerta de entrada de la infección. En muchas zonas del mundo tropical rural una de las principales causas del tétanos neonatal y en adolescentes se debe a la sección del cordón umbilical y a las prácticas de ablación femenina con instrumentos cortantes deficientemente desinfectados.
La mejor forma de prevenir el tétanos es estar correctamente vacunado. De hecho la mayor parte de los viajeros, cuando consultan, han pasado más de diez años desde la última revacunación. A todos ellos se les debe administrar una dosis de recuerdo por vía intramuscular que les dará protección inmediata y durante 10 años. Las personas mayores que nunca han sido vacunadas deben recibir un ciclo completo de tres dosis (D0, D30, D360).